Sala de 2
Sala de 3
Sala de 4
Sala de 5

Sala del Árbol

La adaptación

La Sala del árbol es la puerta de entrada al Jardín. Nuestro desafío es que este territorio, que no es casa, se vuelva confiable para ellxs, que busquen nuestros mimos cuando extrañan y que empiecen a disfrutar con otrxs de los juegos y actividades que les proponemos.

Las actividades de la sala de 2 años se centran en el juego, el movimiento, la palabra. El objetivo es enriquecer la relación que lxs chicxs van entablando con los diferentes materiales y objetos a través de la experiencia. Buscamos dejar huellas con la mano, con pinceles, en hojas, en la masa, en la arena. Huellas plenas de colores, texturas, formas que, lentamente, empiezan a cargarse de intenciones, de significados. Las palabras acompañan el juego, el movimiento, los encuentros. La posibilidad de simbolizar se acrecienta y el mundo se hace más grande, tiene un ayer y un mañana.

Nuestro trabajo se centra en multiplicar el encuentro, en favorecer que haya nuevas maneras de hacerse entender, que lxs nenxs aprendan a hablar y a escuchar, que puedan calmarse y registrar lo que les pasa: ¿enojo? ¿sueño? ¿apuro?, que disfruten de lo que se hace posible cuando están juntxs.

Paulatinamente lxs nenxs de la sala de dos se van incorporando al jardín: comparten la terraza con otrxs chicxs, participan de actividades conjuntas, se integran a la ronda de canciones con la que se inicia el día en el jardín. Y crecen, crecen mucho. Se forma un grupo en el que todxs se reconocen, en el que preguntan por quién no vino o estuvo enfermx. La sala se va transformando al ritmo de las propuestas que van tejiendo una experiencia común.

 

Sala de Soles y Lunas

Lxs nenxs de tres transitan la ambivalencia entre ser grandes y ser chiquitxs, por eso en la sala abordamos proyectos que lxs ayuden a poner en palabras lo que les está pasando. Un personaje comienza a visitarlos y a ser parte del grupo.

Lxs chicxs van interactuando con este personaje al que le pasan cosas muy parecidas a ellxs, el miedo a la noche, a los ruidos, los enojos, los berrinches y las ganas de que sucedan las cosas como cada unx quiere.

También aparecen las ganas de contar y mostrar las cosas que ya pueden hacer solxs y que lxs hacen sentir tan orgullosxs. Por eso uno de los proyectos que acompañan a lxs chicxs a lo largo del año es El día especial. Ese día cada niñx prepara junto a su familia objetos, fotos, imágenes, juguetes y algo rico para compartir. Nos proponemos crear un momento en el que puedan disfrutar de ser protagonistas y sus pares de escuchar, de mirar, de conocer, de compartir.

 

Sala del Mar

En la sala del Mar el grupo comienza a tomar protagonismo. Y los días del jardín a poblarse de barcos, piratas y sirenas. El canto de las sirenas intenta enamorar a los piratas, pero ellos están muy ocupados planificando un ataque a un barco enemigo. Llegan mensajes en botellas que les proponen grandes desafíos, viajes y búsquedas de tesoros.

Una salida al acuario lxs ayuda a conocer los secretos del mar, que ya se transformó en un objeto de indagación que abordamos en la sala desde material informativo, como libros, videos e imágenes.

 

Sala de los Investigadores

En la sala de cinco la energía de lxs chicxs se orienta a investigar el mundo que lxs rodea, a explicarse y pedir explicaciones. Aparecen los desafíos y las preguntas acerca de los orígenes y los ciclos de la naturaleza. El año transcurre entre dinosaurios, insectos e historias que van contando algo más acerca de la vida de cada unx de lxs chicxs.

Historias tuyas, historias mías y nuestras, la sala se convierte en un museo en el que cada unx de lxs chicxs presenta algunos objetos muy ligados a su historia. Un babero, el muñeco preferido, escarpines o algún regalo especial de un familiar muy queridx.